La Eterna Oportunidad de Revancha
Sin duda aquel 21 de Agosto en Río fue un día duro para Julien y para los Absalovers. Tras prepararse con todo lo humanamente posible, sus resultados no fueron lo que él esperaba.
Tal como afirmó días después de aquella carrera, en sus redes sociales «La octava plaza en las Olimpiadas de Río, por supuesto, es difícil de digerir. No puedo explicar ese fracaso. Antes de la carrera todo estaba preparado.
Mi entrenamiento había sido óptimo. Las sensaciones eran buenas. Mi equipo BMC y el staff de Francia me habían proporcionado las mejores condiciones para ganar; quiero darles las gracias a todos. Pero las carreras de un día pueden ser muy crueles y es esa misma razón lo que las hace mágicas, yo las adoro«.
Y es que justamente, las carreras de un día tienen esa mezcla de dramatismo, de expectación, de ir al todo o nada. Más que simplemente mantenerte regular en la temporada o en las fechas de una copa, es hacer y estar en el momento justo demostrando de mejor manera lo que sabes hacer.
Si resulta, esa victoria es para ti independiente de quien venga ganando antes.
El problema de ello es que no eres el único que lucha por el mismo sueño, por ende las probabilidades de fracaso son bastante altas.
Ahora, si vemos al ciclismo desde el lado positivo podríamos decir que siempre se gana, en una ocasión puede ser experiencia, en otra un tips de batalla, o en otra puede ser lograr un desafío que nos hayamos planteado.
Pero dentro nuestro luchamos por lograr nuestras expectativas. Muchas veces no lo logramos y es aquí donde entra el punto donde sin diferenciar el nivel, todos nos igualamos. El seguir intentándolo. Seguir porfiando con la ilusión de algún día poder lograrlo, algún día será nuestro día y será genial!
Para Absalon ese fue su consuelo, Andorra y él no habían sido muy buenos amigos en el Campeonato Mundial 2015, no se había sentido bien en su última carrera, sus expectativas eran altas, pero con la mente fría salió a buscar su gran día. Tras una apretada batalla, Nino comete un pequeño error que le costó un problema mecánico, Absalon vio un rayo de luz y no soltó hasta cruzar la meta, sabía que de los dos, el que ganara, se llevaría la copa de Mundo y lo hizo.
Así nuevamente su porfía lo hizo triunfar. Si no se logra en una ocasión, se sacarán las herramientas para hacerlo a la próxima…o a la próxima…a la próxima si que sí.
Lo importante es no dejar de intentarlo ya que ahí está una nueva oportunidad y un día será nuestro día y será genial!
Has tenido alguna buena revancha?
Grande Absalon, despues del balde de agua fria de los juegos, no aflojo y tuvo su revancha!
El mejor de todos los tiempos.